¿Tienes redes sociales o has pensado incorporarlas para dar una mayor visibilidad a tu negocio y estar más cerca de tus clientes? ¿Tienes una estrategia para tus medios de comunicación sociales o social media? Si tu respuesta es no, francamente deberías planteártelo porque estás perdiendo clientes.
En cambio, si tu respuesta es sí, te toca responder a la siguiente cuestión. ¿Eres de los que publican en las redes sociales, según te vas acordando de publicar o eres de los que ha trazado un plan? Si has contestado la primera opción, seguro que te has dado cuenta que cuesta subir el número de seguidores y de likes en tus publicaciones.
Otros empresarios prefieren delegar a un amigo, a un sobrino o un conocido que dice que sabe de redes sociales. Pero párate a pensar, ¿dejarías en manos de esa persona tu negocio? No, ¿verdad? Esa misma idea es la que debes llevar a tus redes sociales. Para que empieces sacarle chispa lo mejor es dejarlas en manos de un profesional o al menos buscar su asesoramiento. El primer paso es concienciarse de que no es necesario estar en todas las redes sociales.
Si llevar una lleva su tiempo llevar cinco ni te cuento. Y para llevar cinco y de mala manera, mejor es dedicarse una y hacerlo bien. Así que lo primero que hay que ver es cuáles son las redes sociales que más te convienen o mejor dicho en qué redes sociales están tus clientes y tus clientes potenciales. El segundo paso será que un profesional te elabore un plan de social media.
¿Qué es un plan de social media?
Si nunca has oído hablar de él, se trata de un documento en donde se va a recoger toda la estrategia y acciones a realizar en las redes sociales. Forma parte del plan de marketing y es igual de importante que él. Asimismo, está estructurado en varias partes, y que no puedes saltarte ninguna.
Partes que componen un plan de social media
- Análisis de la situación. Definir tu actividad, cuál es tu producto, quién es tu público objetivo, etc.
- Análisis de tu web. Es un elemento esencial para desarrollar un plan de social media efectivo. ¿La tienes optimizada? ¿Puedes vender a través de tu web?
- Elige la plataforma. ¿Cuál es la red que te conviene más? ¿Dónde está tu público?
- Planning de contenidos. Es difícil publicar por publicar, no funciona. Si ya tienes algo de experiencia en mantener tus redes, sabes lo que te cuesta pensar qué contenidos poner en tu Facebook, Twitter o Instagram. Por ello es primordial diseñar el contenido que vas a ir publicando en tus redes sociales o bien contratar un community manager que haga esta función y tú te dediques a sacar adelante el negocio.
- Establece los KPI y objetivos. Es una forma de medir los resultados que se van obteniendo y si no se están obteniendo, poder reaccionar y cambiar la estrategia. Los KPIs (Key Performance Indicator) también conocidos como indicador clave o medidor de desempeño o indicador clave de rendimiento es lo que nos va a permitir ir midiendo los resultados. Algunos ejemplos de KPIs son número de seguidores, clics por número de publicaciones o conversiones, por citar algunos.
- Elaborar un plan B o plan de urgencia. Es decir cuando las cosas no salen como se prevén. Por ello es conveniente tener en la recámara alguna otra alternativa para intentar alcanzar esos objetivos que te has marcado. Otras veces puedes recibir una mala crítica, establece una forma de contestar a esas opiniones negativas, de tal forma que conviertas a ese cliente insatisfecho en uno satisfecho.
- Ahora toca crearte tus perfiles en las redes sociales. Si lo tienes ya, necesitarás comprobar que tus perfiles estén optimizados.
Y tú, ¿cuentas con un plan de social media adecuado para tu negocio?
